Manejo defensivo: la mejor forma de evitar accidentes

Por ello, sí es posible evitarlos, y el manejo defensivo es la mejor forma de hacerlo.

¿Qué es la conducción defensiva?

El manejo defensivo es un procedimiento de conducción que prioriza nuestra seguridad y la de las personas que nos acompañan. Consiste en estar consciente de que otros conductores cometerán errores, de que las vías no estarán en las condiciones que se esperan, o que en cualquier momento la naturaleza jugará en nuestra contra, y emplear las técnicas necesarias para evitar accidentes.  

Básicamente, es utilizar la prevención y la anticipación como nuestra estrategia principal de conducción y enfocar nuestra completa atención en el entorno para actuar rápidamente.

Si ya has adquirido tu primer vehículo, debes saber que la conducción va más allá de conocer cómo funciona tu nuevo compañero, por eso, en Tuautoencasa.com te enseñamos cómo aplicar este tipo de conducción:

-       Puede sonar negativo, pero es mejor que siempre tengas la expectativa de que los conductores a tu alrededor cometerán errores (como cambiarse de carril sin anticipar, frenar de manera brusca, etc). Esto te obligará a activar tus cinco sentidos para actuar ante estos errores de la mejor manera y continuar tu trayecto sin problemas.

-       Aprende a controlar la velocidad. Este conocimiento es de los más importantes, ya que es muy probable que te encuentres con situaciones inesperadas en las que tendrás tomar decisiones al instante, como un gran bache, calles angostas, un vehículo parado en medio de la vía, un niño cruzando la calle, etc.

-       Si es posible, antes de salir infórmate sobre el camino por donde vas a conducir, si está cerrado en algún tramo, si las vías están irregulares, etc.

-       Familiarízate con tu vehículo y conoce cómo reacciona ante tus maniobras, sobre todo, cuánto tiempo le toma frenar para que compruebes si debes aumentar la distancia de frenado (lo recomendable es mínimo 3 segundos de distancia)

-       Ten en cuenta todos los problemas que puede presentar tu vehículo mientras está rodando, como una llanta baja, hidroplaneamiento, incendio, para que conozcas exactamente cuál es la solución que debes emplear.

-       Si observas la impaciencia de un conductor (que quiere sobrepasarte, por ejemplo) déjalo hacerlo. El manejo defensivo también implica gestionar tus emociones a favor de la seguridad de todos. En la conducción habrá momentos complicados, y la actitud que presentas ante estos y las decisiones que tomes marcará la diferencia.  

Con estos consejos, ya estarás list@ para salir a la calle y hacer de tu vehículo una herramienta útil y segura. Y si todavía estás decidiendo qué auto adquirir, ingresa a nuestra página y explora la variedad de opciones que tenemos ¡Seguro encontrarás una perfecta para ti!